10 años del Código ACV: más de mil 300 personas se han atendido en el hospital
Por La Prensa Austral
En Chile, los accidentes cerebrovasculares (ACV) representan una de las principales causas de discapacidad en la población adulta y se caracterizan por una pérdida de calidad de vida. A nivel regional, cada año entre 250 a 300 personas sufren algún tipo de accidente cerebrovascular. Por tal motivo, en noviembre de 2013 el Hospital Clínico de Magallanes implementó el Código ACV, sumándose a esta iniciativa en julio de 2018 el Hospital Augusto Essmann Burgos de Puerto Natales, a través de telemedicina (TeleACV).
El Código ACV es un sistema organizado de atención que funciona las 24 horas del día y los siete días de la semana, dirigido a personas que presenten síntomas de alta sospecha de un ataque cerebrovascular y se encuentren dentro de las primeras horas desde el inicio de los síntomas, para realizar tratamientos como la trombólisis endovenosa. En 10 años, a la fecha, el código se ha activado en más de mil 300 ocasiones en el HCM, considerando 227 trombólisis. En Natales, se han registrado 158 TeleACV y 58 trombólisis, totalizando 250 trombólisis en la región.
El doctor Javier Gaete, neurólogo del Hospital Clínico de Magallanes, explica que las primeras cuatro horas de detección de sintomatología son claves para poder dar tratamiento. “Pueden cambiar de manera muy significativa la evolución de la enfermedad”.
“Es un sistema organizado de atención que abarca desde la atención pre hospitalaria, la detección de las personas que están con la sospecha de los síntomas y que están durante las primeras cuatro horas y media desde el inicio de los síntomas. El paciente puede estar en su casa, el rápido traslado al servicio de Urgencias por el Samu, y en la Urgencia también está organizado para darle prioridad a estas personas, de manera que rápidamente hacer los exámenes de laboratorio, las evaluaciones médicas por neurólogo y la realización de imágenes cerebrales”, explica Gaete.
Para los casos de infartos cerebrales, se evalúan si los pacientes son candidatos a la terapia de trombólisis, medicamento que busca disolver coágulos.
Por otro lado, el manejo de las personas en etapas agudas se realiza mediante las hospitalizaciones en las Unidades de Pacientes Crítico. “Se le da mucho énfasis al tema de la rehabilitación de la persona que se encuentra hospitalizada, el estudio de la causa y los exámenes y posteriormente el seguimiento. Estas personas pueden quedar con necesidad de continuar con rehabilitación ambulatoria y en ese caso en nuestra región cumple un rol fundamental el Centro de Rehabilitación Cruz del Sur”, indica.
Hipertensión, diabetes, colesterol alto o enfermedades del corazón son algunas de los padecimientos crónicos más frecuentes de las personas que sufren accidentes cerebrovasculares y que requieren seguimientos.
Sin embargo, Gaete indica que el 80% de los casos podrían ser prevenidos, por lo que el foco es informar a la población y prevenir es importante. Serían diez los factores más importantes, ya que pueden ser “potencialmente modificables”. Entre ellos apuntó a “la mala alimentación, baja actividad física, problema de sobrepeso y obesidad, consumo de cigarrillos, consumo excesivo de alcohol, estrés, depresión, hipertensión arterial, diabetes, colesterol alto y las enfermedades al corazón”.