Desde el inicio de la pandemia y la posterior suspensión de derivaciones y atenciones presenciales de especialidad,  la Unidad de Hemodinamia del Hospital Clínico Magallanes (HCM) vio afectada el número de producción habitual de procedimientos complejos que anualmente bordea 500 atenciones.

Pese a la baja en el  número de atenciones, esta unidad que diagnostica y trata enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos mediante la introducción de catéteres a través de las arterias o venas, ha continuado con la ejecución y manejo de pacientes urgentes o pacientes prioritarios. “Esto se ha seguido realizando, pacientes que necesitan angioplastia compleja,  infarto al miocardio o implante de marcapaso lo hemos seguido solucionando. Todo esto gracias a la colaboración de todo el equipo multidisciplinario que trabaja en esta unidad; médicos, enfermeras, tecnólogos médicos, arsenaleros, pabelloneros y equipos auxiliares, todo adecuado a la necesidades de la población y en virtud de las restricciones que nos ha impuesto la pandemia”, señaló el Dr. Ricardo Marín, Jefe de la Unidad de Hemodinamia HCM.

Respecto al cuidado y protección del paciente, la Unidad de Hemodinamia HCM ha adoptado  medidas de seguridad  con el uso de equipo de protección personal,  testeo preventivo de todos los pacientes que ingresan a la unidad y  aislamiento preventivo previo , “Como unidad tratamos de resolver todos los casos en la brevedad para que la estadía no se prolongue y definiendo a los pacientes de mayor riesgo”, agregó el Dr. Marín.

Al ser la unidad de Hemodinamia,  la única existente en la región de Magallanes, está enfocada a atender usuarios derivados de los demás centros asistenciales de la zona, tanto beneficiarios del sistema público de salud Fonasa, como privados (Isapre, particulares, Fuerzas Armadas, Dipreca, etc.). También satisface la necesidad de otros centros del país que no cuentan con unidad de hemodinamia, como por ejemplo hospitales de la Región de Aysén del General Carlos Ibañez del Campo.